
Foto: Sara Lobla
Normalmente os muestro todo lo bonito de las bodas y aquello que me transmite buena energía, romanticismo y que es algo especial: la decoración, los vestidos de novia, las propuestas de invitada, el mobiliario… Pero hay una figura a la que no se le suele dar la importancia que merece, es la del maestro de ceremonias. ¡Hoy os hablo sobre ello para contaros, de primera mano, lo que os puede ayudar a la hora de oficiar la boda!

Foto: Lirola Cussó
Cada vez se están viendo más bodas civiles, en las que se puede innovar todo lo que se desee. No hay por qué seguir reglas o protocolos si no es lo tuyo. Divertirse debe ser el objetivo de toda celebración de boda, incluida la ceremonia. En ello tiene mucho que ver la manera de oficiarla. Apostar por la profesionalidad de un experto es vital para conseguir que la ceremonia siga un guion entretenido y que no haya largos tiempos de espera en los que los invitados y vosotros podáis llegar a aburriros.
Yo soy maestro de ceremonias y cuento con una larga experiencia, además de con dotes de comunicación, que considero que son fundamentales para guionizar y celebrar una boda civil.

Foto: Liven Photography
Ventajas de contar con un maestro de ceremonias
La personalización es una de las ventajas que te ofrece contar con un maestro de ceremonias. Los discursos tienen que ser divertidos, las intervenciones cortas y dinámicas. Gracias a que las ceremonias civiles son actos simbólicos, no están cerrados, por lo que se pueden organizar como se quiera, consiguiendo vivir un acto mágico.
La figura del maestro de ceremonias te ayudará, te aconsejará, resolverá tus dudas y, sobre todo, te asegurará la tranquilidad y el éxito del evento. Este tipo de profesionales gozamos de una gran empatía, somos profesionales de la comunicación de los sentimientos, que también hay que saber transmitirlos. Hacer llegar las emociones en la ceremonia a la vez que se sigue un guion no es tarea fácil.
Delegar la responsabilidad de la ceremonia en un profesional supone una tranquilidad para los novios durante la organización de la boda. No obstante, no se trata de desentenderse, sino de todo lo contrario. El experto en oficiar ceremonias compone el guion y la estructura de la boda tras hablar con los novios, quienes le tienen que explicar qué idea tienen de la boda, confiar en él, contarle cómo son como pareja, cómo es su relación y descubrir, poco a poco, como son ellos, para crear una ceremonia a su estilo y en la que se refleje su personalidad. Os guiará para seleccionar las lecturas, elaborar los textos, elegir la música o escoger un ritual.

Foto: Sara Lobla
Otra de las grandes ventajas de un maestro de ceremonias es que es el encargado de solucionar cualquier imprevisto que pueda surgir antes o durante el acto. Cada parte de la ceremonia estará definida, tendrá su timing para evitar cualquier tipo de problema, sin embargo, pueden surgir, y no hay nada mejor que disponer de un experto que sepa improvisar y solucionarlo.
Somos buenos comunicadores que nos encargamos siempre de dirigir la boda haciendo que el protagonismo recaiga sobre los novios, y no sobre los invitados o sobre nosotros mismos. Intentamos dar valor al momento de la ceremonia que, en muchos casos y ante el gran número de tareas en las que se ven envueltos los novios en la planificación, se deja de lado.
Además, esta figura es muy importante en las bodas en las que coinciden invitados de diferentes países, ya que el maestro de ceremonias sabrá oficiar el acto en los idiomas que sean necesarios o contar con un traductor que lo haga. Es esencial que todos los invitados, sin excepción, disfruten del momento.

Foto: True Romance
Un besote,
Rodolfo Mcartney.